Bioterrorismo alimentario, aprenda a evitarlo
Recientemente el gobierno de Australia investiga el misterio de las agujas de coser escondidas en fresas, que ya han causado un herido y han generado alarma en ese país.
Se han detectado canastos de fresas con agujas en seis estados y territorios australianos. En uno de ellos, un hombre tuvo que ser atendido en el hospital tras haberse comido una de las frutas.
Varias marcas han sido retiradas del mercado por estar envueltas en este escándalo: Berry Obsession, Berry Licious, Love Berry, Donnybrook Berries, Delightful Strawberries y Oasis.
El ministro de Salud de Australia, Greg Hunt, ordenó a la Autoridad de Seguridad Alimenticia de Australia y Nueva Zelanda investigar el asunto.
"Este es un crimen muy malicioso y es un ataque general al público", dijo.
El jueves, la Asociación de Agricultores de Fresas de Queensland aseguró que las agujas pueden haber sido puestas en las frutas por un "empleado disgustado". Sin embargo, la policía afirmó que aún es muy temprano para especular.
Las autoridades sanitarias aconsejaron a los australianos cortar las fresas antes de comerlas. El temor a comer fresas con agujas se ha dado en pleno pico de producción, lo que puede tener efectos negativos en esta industria que mueve alrededor de US$93 millones al año.
El lunes, dos de los distribuidores de comida más grandes de Nueva Zelanda, Countdown y Foodstuffs, dijeron haber dejado de importar fresas australianas debido a esta alarma.
Este es un caso ejemplo de BIOTERRORISMO ALIMENTARIO.
¿Cómo evitarlo?
La industria alimentaria tiene diversas reglamentaciones y normativas para la protección de la red nacional e internacional de la comercialización de sus productos.
Uno de ellos son controles de Food Defense los cuales proporcionan las herramientas internacionales para implantar un plan de defensa alimentaria, estar preparado ante un ataque intencionado y prevenir pérdidas por desacato en la identidad de materias primas o productos terminados.
Un Plan Food Defense se basa en tres procesos: Evaluación, Elaboración, Puesta en marcha.
Evaluación: La implementación da inicio identificar las amenazas internas y externas a las que puede estar expuestas el proceso de producción.
Elaboración: Una vez identificada los aspectos más vulnerables de nuestra planta y nuestro proceso, identificaremos las medidas preventivas para reducir al mínimo la vulnerabilidad.
Puesta en Marcha: Consiste en asignar responsabilidades definidas y documentadas a quienes forman parte del proceso de producción con el objetivo de identificar los peligros físicos, químicos y biológicos a lo largo de toda la cadena.
Estas medidas le permitirán asegurar la producción y comercialización de su producto.
Fuente: BBC Mundo